miércoles, 8 de abril de 2009

Estrategias para hacer crecer el consumo de vino (3)

Prestaremos atención eneste post al caso de la cerveza para entender algunas razones que han llevado al crecimiento de esta categoría en España.
  1. Grandes grupos detrás que permiten una gran inversión en publicidad y promoción de muy diversas formas.
  2. Mensajes muy optimistas de amistad.
  3. Vinculación del consumidor con momentos claves de la vida de las personas: la cerveza al salir del trabajo (momento de relax) la cerveza con los amigos viendo el fútbol, el aperitivo. Basta sólo imaginar cuántas botellas y latas de cerveza se abren en hogares cuando comienza un partido de fútbol en televisión para entender la fuerza de esta asociaciónes.
  4. Asociación refrescante de la espuma y la burbuja como combatientes del calor. Al mismo tiempo, vinculación del consumo con situaciones agradables de playa.
  5. Consumo apto para todos los públicos, desde el abuelo en el bar de la esquina, a los jóvenes con litrona, o el ejecutivo que bebe botella verde al salir del trabajo.
  6. Envases para todos los gustos. Botellas de 25cl, 33cl o latas de 33cl y 50cl. Botellas de 0,50cl y de un litro, packs de 6 latas ó 6 botellines…
  7. Extensión del producto a conceptos de comida sana. El éxito de las 0,0 y cervezas sin alcohol en general demuestra como la cerveza se ha adaptado a una demanda latente de un grupo importante de la sociedad.
  8. Asociación con música joven y alternativa. Vincular la música joven con la cerveza ha ayudado a entrar en un público joven que tal vez podría rechazar el consumo de cerveza por asociarlo con sus padres
  9. A nadie se le pregunta si entiende de cerveza al consumirla. Se trata de un consumo sencillo, más próximo al de los refrescos.

Con todo lo que hemos planteado anteriormente podemos entender el crecimiento tan importante de los últimos años en el consumo de cerveza. Entendemos sin embargo que hay elementos muy importantes que la cerveza no tiene… y son los mismos que el vino debe explotar. Pasamos a resumirlos:

  • Intimidad. Podríamos definir el consumo de cerveza como más “ruidoso”. Carece de elementos de intimidad, como por ejemplo ser compañía para una cena romántica.
  • El reposo: salvo en el caso de cervezas de alta gama, no parece que la cerveza sea un producto para degustar con calma. La propia pérdida de frescor que se produce si no se consume con rapidez explica esta falta de reposo o quietud en su consumo. El stress y la rapidez con que todo pasa en nuestra sociedad parece sin embargo “ir bien” con esta carencia del producto.
  • La falta de cultura alrededor del producto. No podemos hablar de rutas de la cerveza o de turismo asociado a la producción de cerveza en España.
  • Escasa vinculación con la comida. Hablar del maridaje de la cerveza es algo mucho menos común que hacerlo sobre el vino. La combinación más evidente es la de cerveza con la comida mexicana.
  • La tripa cervecera”. Pese a que no parece afectar en exceso al consumo, la idea de la cerveza como producto pesado y que engorda e hincha existe.
  • El brindis para grandes celebraciones: la cerveza no parece la bebida más adecuada para brindar en bodas, bautizos, nacimientos de hijos, comuniones, aniversarios, etc. etc.
  • Limitada extensión de producto. A pesar de que existe un gran número de variedades de cerveza, su consumo es muy restringido. El mundo de las cervezas Premium no está ni mucho menos extendido en España
  • ¿Hacer de la cerveza un regalo?
  • ¿Llevarías cerveza a una cena en casa de familia o amigos?.

Hemos querido mostrar estos elementos que entendemos como limitaciones o debilidades de la cerveza dado que entendemos que algunas de las mismas pueden ser entendidas como fortalezas del vino. en el siguiente post analizaremos algunas áreas para explotar en el caso del vino.