jueves, 11 de diciembre de 2008

LA GRAN OPORTUNIDAD QUE OFRECE LA CRISIS PARA EL SECTOR DEL VINO

Todo el mundo habla de crisis: en todos los sectores, países y ámbitos. Crisis de confianza, crisis financiera, crisis del consumo. Crisis.

Hay sin duda empresas, sectores y países que sabrán jugar sus cartas muy bien y harán de la crisis su oportunidad. Para hacer esto hay que estar en la partida y tener cartas o fichas con las que jugar. Un efecto del petróleo a casi 40 dólares el barril es bueno para el consumo... pero es malo para países como Venezuela o Rusia, con enorme dependencia de ingresos energéticos. Es posible que Estados Unidos sepa jugar sus cartas y, con esa situación, aproveche
la debilidad de estas economías en su favor, ya sea política o económicamente. Este es sólo un ejemplo para comentar que ante una situación de crisis, se debe analizar la partida y ver qué ficha toca mover. Los grandes estrategas se confirman en las crisis.

En el sector del vino de España cabe preguntarse si la crisis servirá para algo. Mi experiencia es que el sector vitivinícola en España está muy orgulloso de su producto, y con razón, pero al mismo tiempo el muy tremendista y pesimista en su forma de ver y analizar la realidad (siempre hay excepciones, y en este caso muchas, pues el sector es muy grande).

Uno de los mercados principales de vino para España es el Reino Unido. La devaluación de la libra frente al euro nos encarece y nos deja en una posición muy poco atractiva frente a otros países. La libra está tan baja por dos razones básicas: les interesa ganar competitividad frente a otros países para poder vender... y también porque su Estado tiene tanta necesidad de crédito que hace que la moneda caiga....


Es evidente que el comprador de vino de supermercado en Inglaterra no va a pagar más por lo que bebe en 2009. Es más que razonable pensar que los supermercados británicos tendrán la tentación, obligación y deber de incentivar el consumo y las compras en su establecimiento y que éste no se vaya al vecino con mejor producto a menor precio... y me temo que ellos no van a pagar la factura de una libra baja: va a ser el intermediario o el productor.

No hace falta ser adivino para entender que esta situación se puede repetir en diversos países importadores, haya o no el efecto de una moneda devaluada. El resultado es evidente: menores ventas y menores precios y menores márgenes en exportación y, por otro lado, el consumo nacional tampoco crece.

Es muy fácil sembrar catastrofismo en esta coyuntura, pero el mensaje debe ser el contrario. ¿Qué hace que un consumidor se resista a abandonar una marca por otra? Cada uno tiene que pensar por si mismo. ¿Por qué no dejamos de comprar lo que compramos habitualmente aunque sea algo más caro? ¿Por qué nos animamos a comprar algo nuevo? La respuesta está normalmente en la marca. Esta crisis debería ser entendida de forma positiva, y todos los actores del sector deberían entender que la única solución exterior es mejorar la imagen de la marca de los vinos de nuestro país. Para el consumo nacional la receta es distinta, y puede que aquí la receta sea más del estilo de educar sobre vino. La gente en España no sabe apenas de vino, esto es una realidad: en casa del herrero cuchara de palo… y no se aprecia lo que se desconoce, y no se usa, ni tampoco se paga por ello.

Hacer marca en época de crisis se puede entender complicado. ¿De dónde sacar presupuesto si lo primero que se corta es la partida de promoción? En primer lugar esto no debería ser así, no en el caso del vino: ¿Cuánta gente vive del sector? ¿Qué impacto tiene en el medio rural? Lo que no se puede plantear es, sin embargo, promover sólo la inversión en producción. Esto es un enorme error: hay que vender, no que proteger.

Y luego hay que utilizar el dinero de manera creativa, potenciando las nuevas tecnologías y abandonando medios antiguos que se sabe que no funcionan. Las campañas casi aldeanas, genéricas públicas o privadas, se deben aparcar.

Hay gente que hace más por el vino de España con algunos blogs que muchas campañas millonarias que no van a sitio alguno.

Echen un vistazo a http://www.catavino.net/. Visualmente y por contenidos aquí se habla en inglés, de una forma amena, de nuestros vinos, nuestras marcas y lo que las hace diferentes. Un blog en sí no es nada, pero si lo ve mucha gente, es mucho... y la gente que está detrás de blogs como éste trabaja mucho por ganarse a lectores cada día. No conozco personalmente a quien está detrás de catavino, así que no cabe pensar que "Estos son amigos, y por eso habla bien..."Es mejor entrar, echar un vistazo y ver que este tipo de actividad representa muy bien nuestros vinos: los vende, entran ganas de probarlos, y de pagar.

Otro ejemplo, éste si conocido y promovido desde datavin es www.turismodevino.com/, web de enoturismo para nuestras regiones: Rioja, Ribera, Cataluña, Jerez.... En la versión para extranjeros del portal http://www.winetourismspain.com/ mostramos "wine tours in Spain", algo que buscan nuestro visitantes en google. Hemos pretendido mostrar los encantos de nuestras tierras y vinos, y acercarlos a los miles de personas que entran en la web cada mes. Hacemos muchas acciones para ganar atención al sitio: contactamos con agencias de viajes, participamos en foros, realizamos concursos. Todo esto nos gusta, pero tengo amigos que, por ejemplo, me dicen que lo que hacemos lo debería hacer algún organismo público, sobre todo pensando que en España el turismo es un motor fundamental de la economía, o que debería al menos apoyarlo de alguna forma.

Estas iniciativas, como tantas otras que hay, son ejemplos claros de cosas bien hechas con escaso presupuesto y sin ayuda institucional. La oportunidad de hacer crecer la imagen de la marca de los vinos de España es enorme, pero no se consigue casualmente: hay que tener una estrategia y luego poner las piezas necesarias para que la estrategia se mueva: trabajar y poner medios….. Si quien define la estrategia cuenta con personas con ganas y que conocen el sector, se tomará, sin duda, buen partido de esta Crisis. Si se siguen utilizando recetas que no funcionan el pesimismo será mayor en la siguiente épocas de vacas flacas… El tiempo pasa mientras tanto.


1 comentario:

Javier Rivera dijo...

Me gusta la reflexión sobre la crisis. Y la idea de que es una oportunidad para el que sepa como aprovecharla.
Aun en el caso de que que todos los actores perdieran en términos absolutos, la cuestión es ganar ventaja relativa frente a los competidores, ¿no? O incluso, utilizarla para renovarse.

Y lo de los organismos públicos y la promoción del consumo... ni hablamos.